En 2008 Science Direct publica la investigación del Dr. José Viña editada por Elsevier bajo el título 'El ejercicio moderado es un antioxidante'. El estudio demuestra, de manera pionera, que el ejercicio en sí mismo es un antioxidante. Ello se debe, según queda acreditado en la publicación, a que la práctica de la actividad física potencia los antioxidantes propios del organismo de manera mucho más activa que cualquier antioxidante externo que se pueda tomar.