¿Sabes que un gramo de alcohol contiene siete calorías? Un vino normal tiene un 13% de alcohol, es decir, unas 90 calorías por cada 100 mililitros de vino. Una botella de tamaño estándar de ¾ de litro contiene aproximadamente 700 calorías.
Así que beberse media botella de vino supone darle al organismo unas 300 calorías. Como en todo, la recomendación de ingesta más saludable es la de la moderación: como máximo dos vasos de vino al día (150-200 calorías), uno en la comida y otro en la cena, siempre y cuando tu organismo esté sano.
Si estás siguiendo una dieta debes tener mucho cuidado no sólo con el vino sino con el alcohol en general. El nivel de alcohol y, por tanto, de calorías, de cualquier bebida destilada como coñac, whisky y ron es del 40%.
También hay que estar alerta con la cerveza ya que aunque pueda tener un más de un 4% de alcohol, es decir, la tercera o la cuarta parte del que tiene el vino, por lo que existe más facilidad y predisposición a beber más cantidad. Además, a las calorías del alcohol de la cerveza se añaden las de los azúcares disueltos que se incorporan en la mezcla de su composición con los refrescos.
Mi recomendación principal es la de olvidarse del alcohol mientras sigues una dieta, si lo intentas y piensas que no te compensa dejar de tomar alcohol, toma únicamente las recomendaciones que ha probado la ciencia actual: un vaso de vino en cada comida, no más de eso. En caso contrario, muchos de tus esfuerzos limitando la ingesta de comida, resultarán infructuosos porque las calorías las estarás tomando sin darte cuenta en forma de alcohol.
La intensidad del entrenamiento debe adaptarse a las necesidades y posibilidades de cada persona. Tienes que saber que cuando te entrenas con demasiada intensidad, puedes incurrir en lo que se llama “sobreentrenamiento”. Esto es una disminución en el rendimiento de las funciones del cuerpo que puede extenderse durante semanas e incluso meses, según los estudios que se han realizado.
En algunos casos, atletas olímpicos, justo antes de participar en los Juegos Olímpicos, han caído en el síndrome del sobreentrenamiento y han sufrido situaciones como cansancio y fatiga que normalmente no tendrían, lo que les ha evitado participar incluso en la competición, después de años de preparación.
Si le pides demasiado a tu cuerpo, este esfuerzo físico (y psicológico) puede llevarte a una disminución de tus defensas inmunitarias y a una disminución incluso de tu rendimiento cuando realizas ejercicio físico.
Todo lo que comento habitualmente sobre nutrición, hidratación, suplementos vitamínicos, etc. puede venirse al traste si te sobreentrenas. Como en todo, tu médico y tu especialista en ejercicio físico te dirán cuál es el límite que no debes pasar. El entrenamiento y el ejercicio físico debe ser totalmente individualizado y adaptado a la edad, estructura física y tonalidad muscular de cada persona.
No puedo dar normas generales ya que depende del estado de cada persona, teniendo en cuenta factores como la edad y como la propia naturaleza de la persona en un momento determinado. Solo te digo que tengas mucho cuidado de no sobreentrenarte. Entrenarse es bueno, sobreentrenarte es malo.
Uno de los aspectos más importantes para un buen rendimiento atlético es mantenerse bien hidratado. La deshidratación causa una tremenda merma en el rendimiento durante el ejercicio físico Y muchas veces hacemos deporte insuficientemente hidratados. Esto se debe a que el fino ajuste de la sed que nos mantiene correctamente hidratados, se pierde en parte durante el ejercicio físico intenso.
No quiero decir que durante el ejercicio no tengas sed, pero tienes menos de la necesaria para mantener tu estado de hidratación. La solución es beber más de la sensación de sed que tienes. Ten cuidado, sin embargo, de no ingerir demasiado líquido porque eso te estimulará la necesidad de orinar y puede ser inconveniente durante la carrera. Pero por favor, no olvides esto, mantenerte hidratado es muy importante y más durante el ejercicio.
La hidratación correcta no solamente trata del agua sino también de las sales. El sudor contiene bastante sal en su composición. De hecho, contiene la tercera parte de la sal común (cloruro sódico) del plasma de la sangre. Esto es mucho.
Por lo tanto, conviene tomar bebidas isotónicas durante los ejercicios prolongados, especialmente cuando se hacen en un clima caluroso como es el de verano. No hace falta que toda la bebida que tomas durante la carrera sea isotónica, puedes alternarla con agua. Pero en cualquier caso, recuerda, mantente hidratado, bebe agua y bebe bebidas isotónicas.
Os voy a comentar hoy un aspecto específico para la gran cantidad de población que tiene la tensión alta. El ejercicio físico es saludable para toda la población y en concreto también para la gente que tiene hipertensión moderada o una tendencia a la hipertensión. La explicación es muy sencilla. Si haces un rato de ejercicio con relativa intensidad y sudando bastante, puedes llegar a perder un kilo de sudor.
En realidad, ese kilo no es de grasa y no se trata de adelgazamiento, sino de pérdida de peso. Pero cuando uno pierde un kilo de sudor, o sea, un litro de sudor, ha perdido un litro de agua y sal. Si tienes la tensión alta entonces te conviene, después de sudar, tomar un litro de agua, es decir, tomar la misma cantidad de agua que has perdido en forma de sudor. El resultado neto es que si pierdes un litro de agua y sal (sudor) y recuperas un litro de agua pura, lo que has hecho es perder sal que es precisamente lo que te conviene si tienes la tensión alta.
Por tanto, si tienes la tensión alta no tengas miedo a sudar. Es bueno. Haz ejercicio, suda y rehidrátate con agua. Tu cuerpo lo agradecerá. Pero ten en cuenta que siempre que se trata de enfermedades (y en general siempre que se intervienen en la salud) lo que te doy son normas generales.
Por este motivo, como siempre insisto, es importantísimo que pienses en que todo debe ser personalizado, un ejercicio físico específicamente diseñado para ti. Consulta con un médico que sepa exactamente lo que te conviene. La idea general, sin embargo, se mantiene: si haces ejercicio, sudas y luego recuperas con agua, y así estás contribuyendo a tu bienestar en general porque vas a ayudar a mantener tu tensión baja.
Saludos del Doctor Viña