José Viña

01 Enero 2013 In Blog

Mi principal filosofía de vida en el contexto de la prevención médica es que cuidarse es una obligación de cada uno. Podría pensarse que una persona que se cuida es un egoísta, que solamente está pensando en sí mismo. Nada más lejos de la realidad. Una persona que se cuida es una persona altruista que está haciendo todo lo posible para no tener lesiones que obliguen a que le cuiden los demás. Piensa que si no te cuidas tú, tendrán que cuidar en lo futuro tus seres queridos. No les hagas eso. No les obligues a cuidarte el día de mañana. Empieza hoy a cuidarte tú.

Además, cuidarse es muy fácil. Se trata de seguir una serie de reglas muy sencillas, casi todas de sentido común, y que te van a hacer ser más feliz. Y vas a ser más feliz porque te encontrarás mejor. Cuidándote te encontrarás mejor. Lo primero que notarás es la satisfacción del deber cumplido, la satisfacción que uno tiene cuando ha hecho lo que debería hacer. Además te encontrarás bien física y psíquicamente.

Cuidarse, sin embargo, no es un milagro. Los efectos no aparecen al día siguiente. Requiere, sobre todo al principio, un poco de fuerza de voluntad, pero como decía, es muy fácil.

Cuidándote vivirás mejor. Está demostrado con evidencia científica incontrovertible que siguiendo una serie de normas muy sencillas que iré detallando próximamente alargarás tu vida hasta 14 años. Piensa que no es lo mismo morirse a las 76 años que a los 90. Y además, disminuirás muchísimo el riesgo de ser dependiente de otros. Lo más importante que pretendo es que evites la dependencia. Que minimices las posibilidades de quedarte necesitado de ayuda, como se dice vulgarmente, evitar que alguien tenga que arrastrar el carrito donde te encuentras tú sentado sin poder moverte. 

Si uno se  cuida (manteniendo el peso, haciendo algo de ejercicio, etc.) en la edad madura y en la vejez tiene muchos menos dolores. Piensa lo que es vivir con un dolor continuo. La gente joven y aun la gente madura (aproximadamente hasta la década de los 60) no saben lo que es vivir con un dolor. Los dolores óseos, los dolores en las articulaciones son mucho más frecuentes en las personas mayores que no se han cuidado.  Evítalo a toda costa. Estarás mejor en tu edad madura si te has cuidado. 

LA FELICIDAD EN LA VEJEZ

La vejez es una etapa de felicidad. Es mentira que ser viejo se tenga que asociar a estar triste y deprimido. Está demostrado que esto no es así. Es más, las personas mayores saben su sitio en la vida, saben su sitio en el mundo. Piensa en un joven de alrededor de 17-18 años que no sabe con quién va a vivir, cuál va a ser su pareja, cuál va a ser su profesión, cómo le va a ir en su vida. Una persona de 60 todas esas incógnitas las tiene resueltas y, si se ha cuidado, podrá disfrutar de unos 30 años de vida plena, sin dolor (o con muy poco dolor) y con una sabiduría que le granjeará el aprecio de todos. 

Además, si te cuidas vas a ser más feliz. Te voy a poner un ejemplo: se ha demostrado que la práctica habitual de ejercicio físico aumenta unos compuestos que se llaman endorfinas (que vienen de la palabra morfina) es decir, que hacen que uno se encuentre muy bien. Naturalmente, las endorfinas que se liberan cuando uno se cuida no tienen todos los terribles efectos colaterales que tiene la morfina. Todo son ventajas. 

Por lo tanto, una persona mayor que se mantiene en forma, que hace ejercicio programado como veremos más adelante, va a ser más feliz porque va tener en su cerebro más endorfinas. Esto no es una leyenda; esto es una realidad científica comprobada. Termino esta breve introducción diciendo que envejecer bien es una labor de toda la vida. No vale esperar a ser viejo para pensar en cuidarse. ¡Entonces es demasiado tarde! Hay que empezar ya, no esperes. Envejecer bien es una obligación tuya y es una oportunidad enorme de ser feliz en los últimos treinta años de tu vida. Próximamente, iremos desarrollando aspectos concretos de cómo cuidarte para ser feliz.

¡Bienvenidos!

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